¡Horror! ¡Pavor!

Berrio

Si tienes en tu poder una tarjeta de éstas, deshazte de ella.
Puede causar graves daños. A mí por lo menos me ha causado serios trastornos: dolor de cabeza y rabia.
Y no creo que sea porque contenga una sustancia nociva o porque los dibujos produzcan un extraño efecto, sino porque (¡horror!¡pavor!) he puesto mi mail equivocado.
Ahora me he dado cuenta, y lo peor es que las tarjetas salieron hace meses de imprenta y las he estado repartiendo desde entonces.

Mi mail bueno es:
juanberrio@telefonica.net

El horror y el pavor, en el blog de Juan Berrio.